viernes, 13 de julio de 2018

TU CASA: UN REFLEJO DE CÓMO PUEDE SER TU FAMILIA.


A menudo aparecen programas por la televisión donde muestran diferentes tipos de casas (estilos arquitectónicos, decorativos…). Las familias abren las puertas de sus casas y nos invitan a saber cómo es ésta, dónde viven y cuál es el estilo de vida que llevan. A partir de aquí, podríamos inferir qué tipo de familia vive en esa casa.

En este artículo partiremos del continuo  familia desligada-familia aglutinada, tomando la casa como una metáfora perfecta para saber cómo puede ser una familia. Es decir, podemos clasificar a las familias según el grado de cohesión entre los diferentes subsistemas familiares (parejas, hermanos/as, padres).




El siguiente caso, muestra algunas características de lo que puede ser una familia aglutinada:

Se presenta un hombre de aproximadamente unos 40 años, trabaja en el sector de la hostelería y restauración, no tiene pareja ni tampoco hijos, vive junto sus padres y hermanos.
Invita a entrar a la gente del programa, justo a la hora de comer. Es la casa de la familia Rodríguez Casado. Aparece una gran mesa, están sentados el padre, la madre y sus dos hermanos, que tienen unos 30-40 años.
También aparecen dos primos, de parte de la madre, que vienen cada día a comer con ellos. Durante el reportaje, llaman por teléfono varias veces a la madre, son sus hermanas. Además tocan al timbre de la casa: se añade al café otra de las primas, hermana de los dos que estaban comiendo con ellos.

La reportera pregunta si es normal tanta gente, toda la familia sonríe y comentan que eso es su día a día, por la casa entra muchísima gente. Para ellos esto es lo más normal, se sienten orgullosos de toda la gente que va y viene.

Comentan que la familia va ante todo, juntos hacen una buena piña y su unión da la fuerza suficiente para tirar hacia delante. Precisamente, es por este motivo que ningún familiar de los Rodríguez Casado se ha emancipado. Los hermanos comentan que se encuentran muy a gusto en casa de sus padres y no ven ninguna necesidad de partir. El hermano pequeño comenta que tiene una pareja y que le está presionando para irse a vivir juntos, pero él de momento le está “dando largas”, comenta riéndose que “como en casa en ningún sitio, ¡¡claro que sí!!”, mientras el resto de la familia asiente

Muestran la casa, es la hora de hacer el “tour”. Empiezan por un recibidor muy grande, comedor con una mesa enorme con muchas sillas, una cocina con barra  americana que conecta con el comedor, para ir hablando mientras uno cocina. Continúan por tres habitaciones, las cuales ninguna de ellas tiene puertas, sino que son cortinas, la única habitación que tiene puerta es la del baño. En una duermen padre y madre, en la otra los dos hermanos (litera) y en la última duerme el protagonista, pero es una habitación que se utiliza de “multi-usos”. En ésta, aparece un escritorio con un ordenador y también algunos aparatos para hacer ejercicio físico, ambos objetos son utilizados por todos sus miembros.
La gente del programa realiza preguntas sobre la estructura de la casa y su funcionamiento. Como curiosidad preguntan por qué motivo no hay puertas en la casa. Toda la familia comenta que no las necesitan porque para ellos no existen los secretos, así como tampoco necesitan tener espacios de intimidad o privacidad, en su familia todo es de todos. Los secretos y las confidencias se comparten, no hay espacios para la intimidad ni para momentos de soledad.

Lo que hemos podido observar en este ejemplo, es que el sistema familiar compuesto por diferentes subsistemas (subsistema fraternal, subsistema paternal) no muestra  límites claros entre ellos. Para que estos subsistemas puedan ser funcionales, es importante que cada miembro cumpla la función que le corresponde y, sobre todo, se establezcan límites y fronteras. Hemos podido ver que, de manera metafórica, la casa no muestra límites físicos, no existen puertas  y todos comparten los espacios.
 
Precisamente, en la familia de los Rodríguez Casado se puede ver cómo queda todo muy difuso, todos participan y se mezcla todo entre ellos. Aquello que pueda afectar a un individuo de la familia, afectará al resto.  Cuando un miembro tiene un problema toda la familia se moviliza y empatiza en exceso.

Un aspecto a tener en cuenta es que ningún familiar se va de casa, no ejecutando las etapas del ciclo vital. En este caso me refiero a la etapa de emancipación. Aparecen sentimientos de lealtad, ayuda mutua y, sobre todo, un grado excesivo de sentimiento de pertenencia familiar, no ejecutando el proceso de emancipación, propio de la edad adulta de los tres hermanos.

A modo de conclusión,  diremos que la casa donde vivimos puede ser el reflejo de cómo se  establece y qué estructura tiene nuestra familia. Os invito a que empecéis  a observar y analizar la vuestra. Pensad que éste, la familia aglutinada, es el primer concepto de muchos.



BIBLIOGRAFIA:

Minuchin, S. (2001). Familias y terapia familiar. Editorial Gedisa.





Marta Orcera Duel